Mobile App Analysis
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Detrás de este provocador eslogan se esconde la realidad de las cifras.
Es un hecho, las aplicaciones móviles han cambiado nuestra vida cotidiana hace más de diez años con la aparición de los smartphones.
Sin embargo, la democratización del acceso a Internet gracias al 4G (y pronto al 5G), la llegada de nuevas tecnologías como las Web Apps o las interfaces de voz podrían haber sido la sentencia de muerte para las aplicaciones ya tradicionales.
Sin embargo, lejos de haberse rendido, a las “apps” les va incluso muy bien. Mientras que los usuarios pasaban 5.000 millones de horas en el móvil en 2019, las aplicaciones por sí solas acaparaban el 89% de la atención de los usuarios móviles.
El número de descargas de ese mismo año habría alcanzado incluso los 1.930 millones.
Mientras que el móvil se está convirtiendo en un canal de compra por derecho propio (más de uno de cada cuatro usuarios de móvil compra a través de este dispositivo), las perspectivas de negocio para las aplicaciones nunca han sido tan brillantes.
Y hay que decir que tienen sus ventajas: navegación simplificada, funcionalidades avanzadas, un entorno más personalizado…
Sin embargo, el desarrollo de una aplicación es un proceso largo cuya inversión financiera es de todo menos trivial.
En esta primera parte de un dossier de dos capítulos, el equipo de Contentsquare explica cómo crear una aplicación y hace un balance de los recursos necesarios para permitirte tomar las decisiones correctas en cada etapa.
Debido a su formato y a los medios en los que se basan, las aplicaciones móviles tienen muchas ventajas:
Por tanto, las aplicaciones son mucho más que la simple adaptación de un sitio web para móviles a otro formato.
Por eso deben cumplir objetivos claros y aportar un beneficio real y único al mercado, de lo contrario perderás tiempo y dinero (mucho).
¿Estás preparado para embarcarte en la aventura de diseñar una aplicación móvil?
¡No tan rápido! Antes de dirigirte a las agencias web y a otros diseñadores autónomos, es absolutamente necesario responder a las siguientes seis preguntas para elaborar las condiciones.
No se trata de presupuesto sino de recursos humanos.
Tu primera misión es identificar a las personas que se encargarán del desarrollo o, como mínimo, de la gestión del proyecto si decides externalizar el diseño.
Estas personas deben estar muy motivadas y tener un mínimo de conocimientos (cultura web y gráfica, nociones de código e integración, UX y ergonomía básicas…).
Tu segunda misión es identificar las necesidades de tus clientes y/o prospectos y desarrollar un perfil de usuario típico (las personas).
En esta fase, debes determinar el valor añadido o el servicio que tu aplicación aportará a tus usuarios.
Para ello, tómate el tiempo de analizar las aplicaciones de la competencia para descubrir sus puntos fuertes y débiles. Además, averigua los feedback de los consumidores para destacar nuevas necesidades.
El desarrollo de una aplicación para un smartphone puede tener varios objetivos:
Eres tú quien debe definir tus propios objetivos. Las funcionalidades clave de la aplicación se derivarán directamente de esto.
El coste de una aplicación móvil suele incluir :
Por supuesto, el presupuesto será diferente en función de si decides hacerte cargo o delegar el desarrollo y la parte gráfica.
Si tus presupuestos son limitados, también puede ser una opción la aplicación nativa o la aplicación híbrida:
La cuestión del modelo de negocio de tu aplicación móvil debe corroborarse con tus objetivos. Hay diferentes modelos posibles, cada uno con sus ventajas e inconvenientes:
Si no te has saltado ningún paso, el tema de la promoción ya tendría que haberse configurado en la sección del presupuesto.
No es poca cosa porque la compra de espacios, las relaciones con la prensa o la creación de un anuncio publicitario pueden resultar caras rápidamente.
Elaborar un primer borrador de la campaña te permitirá gestionar el presupuesto de forma más fina posteriormente.
Ahora puedes pasar a la redacción de las condiciones. Aunque este paso pueda parecer tedioso, es imprescindible.
Presenta el proyecto, tu empresa y tus productos, así como us objetivos, detalla las funcionalidades previstas, el modelo de negocio, tus competidores, tus limitaciones, tu presupuesto y tus plazos.
Las luz está ahora en verde y el desarrollo de tu aplicación puede empezar.
Para ayudarte a hacer realidad tu proyecto, te ofrecemos una guía de ocho pasos.
Todos ellos son obligatorios y contribuyen a la comercialización de una aplicación eficaz y atractiva para los usuarios.
El primer paso es hacer maquetas de tu aplicación para obtener un borrador que puedas presentar.
Herramientas como InVision te permiten crear recorridos del usuario y simular el uso de tu aplicación. Si te sientes seguro, también puedes incluir elementos de diseño.
Presentar tu idea a tu equipo, a desarrolladores externos o a clientes fieles en esta fase del proyecto te permite corregir rápidamente los errores de juicio. No descuides esta parte.
Tanto si decides internalizar este paso como si se lo confías a una agencia o a un autónomo, el objetivo será el mismo: definir la dirección artística de tu aplicación a partir de un planning si lo tienes.
Los colores, la tipografía, las formas de los botones y las animaciones serán otros tantos elementos que deben constituir el kit de UI o style guide (volveremos con más detalle sobre las buenas prácticas de diseño y UX para aplicaciones en el segundo capítulo).
Sin embargo, hay que tener en cuenta que una buena aplicación tiene una navegación sencilla, una interfaz clara y una cantidad razonable de contenido para mantener la atención del usuario.
Al igual que con la creación de prototipos, no dudes en someter tu diseño a críticas para ir más rápido y obtener inspiración.
Por fin ha llegado el momento de desarrollar tu aplicación.
También en este caso será necesaria una organización impecable. Por eso favoreceremos metodologías como la ágil, por ejemplo.
Trabajando sobre la base de “sprints” de 7 a 15 días, los métodos ágiles permiten entregar rápidamente una versión de la aplicación con funcionalidades críticas para probarlas y mejorarlas.
El proyecto debe dividirse en un máximo de tareas y sub-tareas para :
Herramientas colaborativas como Trello o Asana serán de gran ayuda.
El desarrollo y el diseño están ya muy avanzados y es el momento de anticipar el lanzamiento de tu aplicación móvil.
Los primeros días serán decisivos. Por eso, hay que vigilar de cerca el uso que harán los usuarios de la aplicación.
Para ello, equípate con una herramienta que te permita seguir el recorrido del cliente y la experiencia dentro de la aplicación.
La herramienta de análisis de Contentsquare Apps permite mapear las diferentes pantallas de una aplicación móvil para entender cómo interactúan los usuarios móviles, qué les motiva y qué les dificulta.
Antes de dar a conocer tu aplicación al público en general, planifica un lanzamiento beta con un pequeño grupo de personas.
Puede tratarse de familiares y amigos, embajadores de la marca, usuarios de tu foro si lo tienes, proveedores o personas que se ponen en contacto regularmente con el servicio de asistencia con sugerencias de mejora.
Esto te permitirá corregir los últimos puntos de fricción y observar a los usuarios en situaciones casi reales.
Es el momento de presentar tu aplicación.
Asegúrate de leer las directrices de las diferentes tiendas para facilitar la aceptación de la app por parte de las plataformas.
Piensa también en trabajar la App Store Optimization, el SEO de las aplicaciones (volveremos a ello en el próximo capítulo).
Tu objetivo aquí es sencillo: conseguir el mayor número posible de 5 star ratings lo antes posible para que las tiendas lo propongan. Tus amigos y familiares y tu comunidad de probadores beta te serán de gran ayuda.
Las formas de promocionar tu aplicación móvil son numerosas y dependen directamente de tu presupuesto, pero también del ADN de tu marca. Puedes, por ejemplo, :
Gracias al feedback recogido de los usuarios y de la prensa, así como a los datos de las herramienta de seguimiento, propón mejoras regularmente mediante actualizaciones.
Además, algunos usuarios están acostumbrados a esperar a que se corrijan los errores iniciales o los posibles problemas de seguridad antes de descargar una nueva aplicación. Piensa también en ellos.
Ahora tienes todas las cartas en la mano para :
En el próximo capítulo, veremos cómo superar los límites de tu aplicación móvil para destacar entre la multitud con UX y ASO. Hasta pronto 😉 .
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